ERC prepara la vuelta de Oriol Junqueras a la vida pública con un importante acto electoral. A falta de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ratifique este viernes las elecciones catalanas del 14 de febrero, los republicanos cuentan con que el líder del partido participe activamente en su campaña y se convierta en un activo electoral protagonizando al menos un mitin y arropando al candidato republicano, el vicepresident Pere Aragonès.

Junqueras, que se encuentra en prisión desde noviembre de 2017 tras su condena a 13 años por sedición y malversación por el procés, cumple el próximo sábado 30 de enero un cuarto de su pena, de manera que tendrá derecho a pedir permisos penitenciarios, con un límite de 36 días al año y siempre y cuando no sean más de siete días seguidos. Una nueva condición que ya disfrutan otros presos independentistas como los Jordis, que empezaron a disfrutar de permisos en enero del pasado año, o Joquin Forn, que hizo lo propio en junio o Josep Rull, en octubre.

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Así, el día 30 Junqueras ya podría pedir su primer permiso penitenciario, que llegaría en plena campaña electoral y que tendría que ser aprobado por la Junta de Tratamiento de la cárcel de Lledoners. Un paso que supone un mero trámite, después de que fuera concedido a otros líderes presos. 

Junqueras, que se encuentra en prisión desde noviembre de 2017 tras su condena a 13 años por sedición y malversación por el procés, cumple el próximo sábado 30 de enero un cuarto de su pena, de manera que tendrá derecho a pedir permisos penitenciarios

El ex vicepresident de la Generalitat ya consiguió salir de prisión el año pasado para dar clases, gracias a la aplicación del artículo 100.2; el pasado julio la Generalitat también le concedió el tercer grado, que le dejaba en semilibertad junto al resto de presos independentistas, pero la decisión fue poco después anulada al ser recurrida por la Fiscalía ante el tribunal sentenciador, la Sala Segunda del Tribunal Supremo.

Sin embargo, el nuevo rango que adquiere Junqueras a partir de la próxima semana le permitirá su vuelta al escenario político catalán, después de que en los últimos meses sus intervenciones se hubieran limitado a entrevistas. En la dirección de ERC manejan varios planes alternativos para el acto central de campaña, en que Junqueras arropará al candidato republicano; sin embargo, los republicanos no descartan que participe en más de un acto, haciendo uso de varios permisos penitenciarios durante la campaña, que arranca en la noche del jueves 28 de enero.

El partido minoritario del Govern ya asume que gran parte de la campaña se realizará por medios telemáticos dada la mala situación sanitaria por el coronavirus. Sin embargo, sí planea varios actos presenciales en los que estará el líder de ERC encarcelado; una baza que, esperan, sirva de revulsivo en los comicios y arrastre el voto de indecisos que podrían verse afectados por el llamado efecto Illa, tras el nombramiento sorpresa del ministro de Sanidad como candidato del PSC a los comicios.